Cuidados básicos para gatos mayores

Aunque nos duela, los años también pasan para nuestros amigos felinos. Debido a su naturaleza independiente, es posible que tardemos algún tiempo en reconocer síntomas de vejez en el día a día de nuestros gatos. A pesar de que algunos pueden vivir hasta cerca de 20 años, los primeros indicios de longevidad pueden aparecer en torno a los 8 años de vida.

La reducción en sus movimientos, una pérdida de agilidad o un menor apetito pueden indicar que ha llegado el  momento de prestar mayor atención al amigo peludo de la casa. Con los consejos incluidos en este post, tu minino disfrutará de una agradable vejez con una salud de hierro.

Alimentación especial

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Como ya adelantábamos, es en torno a los 8 años cuando los gatos domésticos comienzan a ver debilitados sus huesos, músculos y sistemas orgánicos. Esto, unido a una pérdida del apetito y a una menor actividad física, hace que se vuelva necesario vigilar la alimentación del animal con mayor detalle.

Son múltiples las marcas especializadas en mascotas que cuentan con líneas orientadas a animales mayores. Debemos asegurarnos de que la nueva dieta sea baja en grasas. De este modo, el organismo deberá hacer menor esfuerzo y se evitará el sobrepeso del gato. Por otro lado, resulta primordial elegir piensos que incluyan componentes energéticos (como la taurina) en su composición.

Otro síntoma del envejecimiento es la disminución del apetito. Para combatirlo, puedes optar por piensos húmedos. Éstos, además de ser más atractivos para el animal (al poseer mayor potencia aromática), son ideales para evitar daños en la dentadura y contribuir a la hidratación de tu mascota.

Descanso y aseo

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Tal y como sucede con los humanos, las dolencias en las articulaciones y músculos de los gastos se acentúan con la edad. Por este motivo, es importante que el sitio en el que nuestra mascota descanse sea cómodo y esté adaptado a la temperatura de cada estación. Recompensa sus años de compañía dedicando un rincón de la casa exclusivamente para él, alejado del ruido y el ajetreo diario.

Por otro lado, podemos ayudar a nuestra mascota en sus labores de aseo. Para ello, se aconseja peinar al animal, ya que algunos, con los años, se vuelven perezosos incluso para su propia higiene. De esta forma, además de compartir momentos con ellos, conseguiremos reducir la formación de bolas de pelo en el estómago y posibles infecciones cutáneas.

Más visitas al veterinario

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El control médico ha de ser más frecuente en edades avanzadas. Como mínimo, nuestros amigos felinos deberán visitar dos veces al año la clínica veterinaria. Una vez allí, el personal especializado chequeará el estado físico de tu mascota para encontrar cualquier problema en su salud.

Del mismo modo, la atención ha de aumentarse en cuanto a las vacunas del animal. Una menor actividad física o salir poco de casa, no eximen a los gatos de contraer enfermedades infecciosas.

Un poquito de deporte

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Aunque el paso del tiempo reduzca sus niveles de energía, es preciso que nuestras mascotas realicen un mínimo de ejercicio físico. Bastará con que juegues con ella de forma tranquila, intentando que se mueva durante unos 20 minutos diarios.

Una vez finalizado el movimiento, aprovecha para darle un masaje en las patitas. Además de hacerlo ronronear, evitarás el anquilosamiento de los músculos.

Estas atenciones tan sencillas permitirán a tu amigo felino gozar de una excelente salud evitando sustos innecesarios. ¡Ah, un último consejo! Aumenta las dosis de cariño para que tu mascota disfrute de una vejez aún más agradable. ¡Te esperamos en el próximo post!

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